En el vasto tapiz de la historia mexicana, pocas figuras brillan con la intensidad de Sor Juana Inés de la Cruz (1648-1695), conocida como la “Décima Musa” y pionera del feminismo intelectual. Esta monja jerónima no solo fue una de las mayores poetisas del Siglo de Oro español, sino una mujer que, en una época dominada por hombres, defendió con fervor el derecho de las mujeres a la educación y al conocimiento. Su vida y obra son un faro de empoderamiento, recordándonos que la inteligencia no tiene género. ¡Acompáñanos a descubrir su fascinante trayectoria!
Sus Orígenes: Un Talento que Floreció en la Adversidad
Sor Juana nació el 12 de noviembre de 1648 en San Miguel Nepantla, una pequeña hacienda cerca de la Ciudad de México, en la Nueva España (hoy México). Fue hija ilegítima de Pedro Manuel de Asbaje, un militar vizcaíno, y de Isabel Ramírez, una criolla mexicana. Criada en un entorno rural y sin acceso formal a la educación, su curiosidad innata la impulsó a aprender por su cuenta. A los tres años, ya sabía leer; a los ocho, componía versos y devoraba libros de la biblioteca de su abuelo.
Huérfana de padre temprano, se mudó a la capital con su madre y, gracias a su ingenio, atrajo la atención de la corte virreinal. A los 16 años, ingresó como dama de honor de la virreina Leonor Carreto, marquesa de Mancera. Allí, deslumbró a la élite con su erudición: resolvía problemas matemáticos, debatía filosofía y hablaba latín con fluidez. Sin embargo, el matrimonio no era para ella; rechazó propuestas y, en 1667, ingresó al convento de las carmelitas descalzas, y luego al de San Jerónimo en 1669, donde encontró el espacio para dedicarse al estudio y la escritura, lejos de las presiones sociales.
Su Obra: Poesía, Teatro y Defensa de la Mujer
La producción literaria de Sor Juana es un tesoro del Barroco hispanoamericano, con más de 200 obras que abarcan poesía, teatro, prosa y música. Sus temas favoritos: el amor, la fe, la ciencia y, sobre todo, la crítica social. Entre sus piezas más icónicas:
- “Primero Sueño” (1692): Un poema filosófico de casi 1000 versos, inspirado en la mitología y la astronomía, donde explora el alma humana en busca del conocimiento. ¡Es como un viaje cósmico feminista!
- “Respuesta a Sor Filotea” (1691): Su manifiesto feminista por excelencia. En esta carta, defiende el derecho de las mujeres a estudiar, argumentando: “¿Qué podemos saber las mujeres sino filosofías de cocina?”. Critica la hipocresía eclesiástica y reclama igualdad intelectual.
- Poesía amorosa y villancicos: Obras como los sonetos a la duquesa de Aveyro o sus redondillas (“Hombres necios que acusáis a la mujer sin razón”) son joyas de ironía y pasión, donde cuestiona el doble estándar de género.
- Teatro: Autos sacramentales como El divino Narciso y comedias como Los empeños de una casa, que mezclan humor, mitología y sátira.
Su estilo barroco, lleno de conceptismo y culteranismo, refleja su vasto conocimiento en teología, matemáticas, música y ciencias naturales. Sor Juana fue una polímata: inventó un sistema de notación musical, estudió astronomía y hasta experimentó con recetas culinarias en su celda-convento, que era un verdadero laboratorio intelectual.

Legado: Una Inspiración Eterna para las Mujeres
Sor Juana enfrentó censuras de la Iglesia –su “Respuesta” le valió la prohibición de escribir– y murió en 1695 durante una epidemia, cuidando a sus hermanas monjas. Pero su voz trascendió: influyó en el Ilustración, el feminismo moderno y figuras como Simone de Beauvoir. En México, es un ícono nacional; su rostro adorna el billete de 200 pesos, y su convento es ahora la Universidad del Claustro de Sor Juana.
Hoy, en un mundo donde las mujeres seguimos luchando por espacios, Sor Juana nos enseña que el conocimiento es poder. ¡Lee sus obras, inspírate y reclama tu pluma! ¿Cuál es tu poema favorito de ella?
