Al pensar en vacaciones lo primero que aparece en nuestro rostro es una enorme sonrisa con solo imaginar el sol, el mar, la arena… El verano es el momento de romper con la rutina, desconectarse de la vida cotidiana y cargar las pilas.
Sin embargo, este cambio de hábitos puede venir acompañado de desajustes en nuestra salud, uno de los más comunes son las irregularidades intestinales.
Todos, sea la época que sea del año, tenemos un reloj interno que nos va avisando de cuándo debemos dormir, cuándo comer o cuándo ir al baño. En verano, al cambiar nuestra rutina, el funcionamiento de este reloj también cambia radicalmente.
El cambio en nuestra alimentación y en nuestros horarios, nos hacen víctimas de estas irregularidades en el tránsito intestinal, lo que se puede convertir en un incómodo acompañante de viaje. Pero no todo son malas noticias, estas irregularidades intestinales se pueden solucionar con sencillos pasos.
1. La alimentación es uno de los primeros aspectos que se ven afectados, durante las vacaciones, la cantidad de fruta y verdura se sustituye por nuevos platos que alteran nuestra dieta, para compensarlo debemos consumir alimentos ricos en fibra vegetal que favorezcan al tránsito intestinal como: cereales, legumbres, frutos secos, verdura y fruta, entre otros. Además, organizar nuestras horas de comida y hacerlo con tranquilidad, favorece a una mejor digestión.
2. Comer en lugares públicos es algo muy común, que aumenta al estar fuera de casa para conocer las comidas tradicionales de la zona. Esto hace que las posibilidades de tener una infección gastrointestinal aumenten, pero existen opciones naturales, como los probióticos, los cuales son bacterias benéficas que ayudan a mejorar el estado de la flora intestinal. Una opción segura y eficaz es el Lactobacillus Rhamnosus GG, el cual puedes encontrar en Vivera®, Tener una flora intestinal fuerte te ayudará a disfrutar al 100% durante tus vacaciones.
3. Otro aliado para el tránsito intestinal son los líquidos, beber agua es primordial para disminuir enormemente las posibilidades de padecer estreñimiento.
4. Por último, activar tu organismo practicando algún tipo de actividad física es una de las mejores herramientas para combatir las molestias intestinales. Algunas de las alternativas que ayudan a evitar el sedentarismo son los paseos por la playa, montar en bici o nadar.
Si todavía no estas de vacaciones o apenas las estas planeando, toma en cuenta estos sencillos pasos para disfrutar al máximo todo tu verano.
