Texto y fotografía: Carla Torres.
Las redes sociales han logrado que la juventud
mexicana se motive a participar en eventos masivos y hacer algo diferente, divertido, ordenado y con respeto. Es así como Flashmob efectuó por 3er año consecutivo el Viaje en metro……. sin pantalones!!!
El punto de reunión fué en la escalinata de la Estela de Luz el domingo 13 de enero, el ánimo y buena vibra se sentía entre porras, el canto de “Cielito lindo” y por supuesto el efusivo grito de “México,México” mientras los participantes esperaban con paciencia su turno para ingresar al subterráneo.
Las reglas eran claras: Respeto a las instalaciones y a la gente que no participaba en el evento.
La ruta estaba establecida, autorizada y reconocida por las autoridades correspondientes, iniciando en metro Chapultepec, con transbordos en Tacubaya, Mixcoac, Zapata, Hidalgo, y finalmente terminar el recorrido en metro Revolución.
Así emprendimos la caminata al metro, todos súper emocionados, en grupos, cada uno con su boleto o tarjeta en mano,pasando los torniquetes, la adrenalina empezó a subir, de repente, se sintió el aire que avisaba la llegada del largo gusano naranja que estábamos por abordar, y los gritos no se hicieron esperar.
En los vagones, todos muy tranquilos, sentados o parados, se volteaban a ver. De repente, el primer valiente entro en acción, y con toda naturalidad, empezó a desabrocharse las agujetas, quitarse los zapatos, el cinturón y….fuera pantalones!!!! los demás del grupo le siguieron.
Las caras de sorpresa de los usuarios que no tenían ni idea de lo que estaba sucediendo eran fenomenales. Algunos pensaban que era como cámara escondida o simplemente una broma. Esto apenas empezaba, conforme íbamos avanzando , los grupos empezaban a tener una especie de hermandad muy divertida.
El transbordo en las estaciones se convirtió en un hormiguero de personitas encalzonadas: mujeres, niños, hombres, amigos, parejas, familias, todos disfrutando el recorrido y sorprendiendo a las personas “con pantalones”, mientras esperaban en el andén con las piernas desnudas.
Personajes disfrazados de súper héroes, luchadores, trajeados, lectores, chicas del hula hoop, ciclistas, patinadores y una gran variedad de boxers, tangas, bikinis, diferentes cortes, colores y estampados vestían los vagones.
Cámaras por todos lados, posaban con policías, vendedores del comercio subterráneo, con los transeúntes que los encontraban en el camino y entre ellos.
Por supuesto que no faltó el baile cuando se subió el vendedor ambulante de cds con la música a todo volumen y el vagón unísono entonaba “Fuera pantalones, fuera pantalones”.
Realmente era increíble la transformación de la conducta del ser humano en una actividad cotidiana, donde por lo general , no se preocupa por voltear a ver quién está sentado a tu lado, y mucho menos a darle un saludo, ahora convivían y la pasaban bien.
El morbo pasaba de largo y se convertía en una situación simpática de ver a una persona en ropa interior subiendo la escalera eléctrica, sin existir juicios de cuerpos flaquitos o gorditos, había una aceptación,un gran respeto y algo admirable, la seguridad de cada individuo al despojarse de su ropa.
Finalmente llegamos al metro Revolución, donde el desfile sin pantalones salió a las calles que conducían al Monumento del mismo nombre, donde culmino el evento refrescándose en las fuentes de la explanada y tomando la foto oficial del recuerdo.
Así, Flashmob demostró como se puede reunir un grupo de personas, que sin conocerse, pueden trabajar ordenadamente en equipo, aceptándose, respetando y lo mejor de todo: divirtiéndose.
Fotografías: Cámara Olympus SZ-30MR
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